domingo, 19 de agosto de 2007

Micro-trasplante Capilar

El microinjerto o microtrasplante de cabello está demostrando ser la solución más efectiva para la calvicie masculina.
A ningún hombre le gusta que se le caiga el pelo, pero mientras unos lo van asimilando como un proceso natural que apenas influye en su personalidad, para otros significa un trauma decisivo, de modo que todo en su vida comienza a girar en torno al problema de la calvicie.
De acuerdo con la doctora Mónica Rolando, directora de la Unidad Médica Serrano, en Madrid, España, la cirugía de microtrasplante se realiza con anestesia local, en dos fases simultáneas.
La primera consiste en extraer de la nuca o laterales una banda de piel con cabello.
La herida se sutura y sólo quedará una ligera cicatriz superficial, prácticamente imperceptible. Este proceso lleva al cirujano alrededor de 15 ó 20 minutos.
Los cabellos se separan con bisturí por unidades, de dos en dos o de tres en tres. "Es un trabajo muy minucioso que ha de procurar no estropear el folículo", señala la doctora Rolando. En la segunda fase se anestesia y prepara la zona receptora para el trasplante. Trasplantar tres mil pelos puede durar entre 75 y 90 minutos.
"“Después de un mes y medio, el folículo elimina el cabello trasplantado y genera uno nuevo, que crecerá a razón de un centímetro por mes.
Es un proceso fisiológico, natural y seguro. Los pelos que trasplantamos son genéticamente sanos, porque en esas zonas laterales y nuca no hay receptores genéticos que provoquen la alopecia", indica la doctora Rolando.
El microstrasplante capilar se realiza generalmente en dos sesiones, con un intervalo entre ellas de dos a seis meses, aunque el número de sesiones depende del tipo y grado de alopecia. Para una calvicie moderada será suficiente una sesión, pero para las grandes, pueden ser necesarias entre dos y cuatro sesiones.
"La zona trasplantada no necesita llevar ningún tipo de vendajes, aunque se aconsejan ciertos cuidados mínimos durante las primeras 24 horas. Después, se podrá aplicar un lavado suave con la yema de los dedos”, señala.
Indica que debido a que el microtrasplante capilar se considera una cirugía secundaria, no implica suspender las actividades cotidianas.